martes, 1 de julio de 2008

España y el fútbol: somos una nación






Una vez más, la alegría de haber conseguido algo que llevábamos desde 1984 suspirando y deseando, nos ciega la percepción de una cruda realidad, la cual, lejos de darnos tranquilidad y seguridad augura un devenir más que preocupante. El Gobierno, ya con experiencia política y diligencia en la gestión de tiempos -algo que la Suposición, perdón Oposición - todavía ni se ha planteado, aprovecha matizando a su conveniencia la situación económica que, por otra parte, hay que reconocer que nos viene de fuera, con la gran noticia del triunfo de la selección. Nadie habla de las banderas alemanas hizadas por los nacionalistas en España, nadie habla de que un presidente de Federación autoimpuesto por los años de los años se ha cargado escuchando a un director deportivo férreo, nunca mejor dicho, y rindiéndose a un nuevo triunviriato (Hierro-Raúl-Del Bosque) que ya se dio a conocer en el Real Madrid y que se tuvo que cortar de cuajo antes de que llegara el desastre. Pues el vestuario se hundía... Ojo al dato Sres., que el espíritu de ese grupo de 23 jugadores puede irse al traste en cuestión de días, como siempre lo jodemos todo cuando las cosas van bien.

Una gran alegría me dió el que un francés como Platini se acordara de alguien a quien le debemos haber participado de la final de 1984 y que lo hemos defenestrado, como es típico de nuestro país, hablo de Don Luis M. Arconada. Palop, salió con esa camiseta verde de "le Cog sportif" que mandan h... irse a Francia con indumentaria francesa... pero bueno, poderoso caballero Don Dinero... Se hizo una pequeña justicia, pero como siempre tienen que venir de fuera para reconocer a los nuestros. Arconada, siempre te debemos recordar como el mejor de los porteros que ha tenido la selección, aunque bien es verdad que Casillas promete superar todos los pronósticos. Al menos él sí que te reconoce, es un placer ver esta piña.

Por cierto... Quién dijo que España está muriéndose... Si sois cuatro gatos amargados los que vais en contra de este país, anda ya... Por cierto, menos banderita española en la solapa y más salvaguardar nuestra Constitución. Ay Dios, pero que vergüenza de partido de oposición tenemos... Si es que lo hay.

Sarkozy y el Conservadurismo moderno


Francia, desde hace ya muchos meses experimenta un protagonismo en Europa que, si bien lo ha tenido a lo largo de la Historia, tiene un especial vigor reforzado por la persona del Presidente de la República Francesa. Nicolas Sarkozy es un Presidente que se mueve por sentimiento, por fe en lo que hace. Decía Antonio Maura que "gobernar es tener fe en sí mismo" y este dirigente europeo encarna esa afirmación, con independencia de la ideología del observador que lo valora.

Ese es el conservadurismo que necesitaría nuestra oposición conservadora, tanto en Baleares, como en España: tenacidad, reflejos políticos y acciones.

Nos quejamos de nuestro Gobierno, ante esa venida en avión rescatando a ciudadanos españoles a lo héroe nacional, pero hay que reconocer que fue una vergüenza que, ante la inactividad problemática, uy perdón, diplomática, tuviera que actuar el gobierno y (no lo olvidemos) la diplomacia francesa.

Sarkozy empieza a calar en Europa y con el tiempo, de seguir esa constante, apuesto por él como nuevo lider europeo. Ay Rajoy... no comment... Para entonces ya no estarás, el tema es si estará tu partido. Dicen en la última encuesta que Rajoy está en un 43 % (11 puntos) por encima de ZP, pero, es que es normal, es como una telenovela, engancha... de qué manera caerá es la gran incógnota y eso lleva adeptos y adictos. Los líderes de los partidos intervienen en sus juntas regionales, pero Rajoy lo hace en las crisis, y como le salen por todo... Pues claro... Por cierto, qué hace Pizarro en la Comisión Constitucional, en vez de la económica... No era un fichaje económico? qué hacía debatiendo... o escuchando a Solbes en ese debate fallido? ay ay ay Señor... Volvamos a nuestros vecinos de la France.

Francia es una gran nación, una nación que ha dirigido en decisivos momentos de la historia de Europa, el destino de sus ciudadanos. Ojalá Napoleón hubiera insistido más y hubiera impuesto con vigor a Pepe Botella, nos hubiera ido mucho mejor que con Fernando VII.

Francia, de la mano de su Presidente, de este presidente, tiene mucho que decir.

Vive la France y Viva España... Faltaría más.